jueves, 25 de marzo de 2010

¿Por qué no soy una mosca?

No se comienza a vivir con mera biología.
Una mosca no se sabe a dónde va cuando la matan.
Una mosca puede dormirse y a quién le importa
que sea distinta a un gargajo, o que vaya a un reino
delicioso o macabro de moscas.
Una mosca no necesita perdón como el hombre
ni gran espacio para sentirse ocupante,
nadie le mide la importancia, si tiene o no
corazón que sufre, ¿qué importa?

Ella, de por si, es un artificio
de organizado biotismo y... aún así da zumbidos;
pero yo no soy una mosca ni un gargajo.

Yo necesito darme dignidad para sentirme vivo.
No me gusta la vida sin conocer mi sentido;
yo sí quiero el perdón al sedimento que ocupo.
A cada célula que se acomode a mis huesos
la quiero afortunada y la bendigo.
Yo sé a qué olores acudo, a qué apariencia
querrán acostumbrarse mis ojos y me gusta que soy
algo más que mi nombre, o mi taxonomía.

Me gusta el Ser, distinguida ontología
para la carne; entonces, sí entrego el cuerpo
y lo muestro orgullosamente y lo bendigo
cuando lo ocupo.

*

Un día que me llamaron

Un día me llamaron «¡Carlos!»,
pero yo era más que Carlos, o un dato,
o señal nominativa. En rigor, conozco a una perrita
que la llaman Carlota, a un ratoncillo
que lo nombra Miguel, Mickey,
otro gato conozco que lo llaman Carlos.

Un día me llamaron Carlos y yo estaba
fuera de mi cuerpo, casi en el techo,
oyendo cómo llaman a las cosas y cómo se maltratan
los hombres y se gritan y fundan el desprecio
y no quise contestar... Esa vez me dí cuenta
que yo soy más que un nombre.
Ese día si me hubiesen llamado mosca muerta,
o mosca viva, me habría dado lo mismo.

*

Cómo descubrí la vida

Para sentir la gratitud que se debe
a la vida, hay que venir a la tierra,
al viaje placentario desde el túnel de la muerte.
Llegar con un conocimiento: ¡Ay, profundo evento,
este de conocer el espacio y el sonido secreto
(que lo inunda, porque no hay nada que sea
realmente vacío), hay un plenismo infinito
que se hila, que se teje, que se tantra,
y una voz cuántica en él, OM OM OM
que nos da el Nombre Verdadero,
la esencia que nos pertenece.
Nombre que no es Carlos ni Juan de los Parlotes,
nombre sin apellidos, más puro que todos
los perdones, más puro que todos los limpios antecedentes
que se pueda hilar enla historia o las genealogías
y yo escuché ese Nombre y me dijeron que pida
todo lo que es mío, en nombre de mi nombre verdadero
y fue cuando pedí la dignidad de ser...
Y nací... no por accidente. Lo quise.

*

Pero me hallé con gente que me niega

¡Cómo me extendí en el espacio-tiempo
con inocencia de ser-para-saberme!
Saberme desde antes una esencia,
pre-comprensió n de mi ser maravilloso;
ser que ninguna deuda tuvo y pidió el claror,
otero transparente, pre-requisito
para serme-en-el mundo.

¡Cómo me extendí desafiando oscuridades
hasta que abriera los ojos, cómo fue tan dulce
la voz de mi madre y su olor que, por dulce,
creí que nacería en el corazón
de una pepa de guayaba!

Y sí, con ella, cuando me dijo adiós,
sentí nostalgia de la muerte, esa amiga
que habla y nos susurra el Nombre Verdadero,
el que no tiene deudas, el que es Anahta-zabda,
y se oye, como voz que viene de los cielos,
Akâza-vani, a casa vamos, a casa regresaremos,
pero... antes toma un poco de esa arcilla del mundo,
sedimentos de ese espacio y ese tiempo,
y díle Tu Nombre; díle que eres Carlos
sólo por un rato, no para siempre.

Para siempre, el Nombre con que te vibró
el cielo para darte el Ser, ser que es más
que la vida en el cuerpo, porque que estés vivo
es que estés despierto, oyendo tu Verdadero Nombre.

No es Carlos. Desmiéntelos y díle que el día
en que te adeuden, te vas. Que el día en que asignen
a tí el valor de una mosca o gargajo, te regresas
a casa, Akâza-vani, a casa, Tu Morada,
a esa vibración con la que sólo se solazan
los inmortales, quienes se afirman desde sí
y antes de echarse en la vagina biótica
de un ente, o la onticidad errante,
reclaman lo que les pertenece:
la dignidad de ser.

*

Según crezco me salva el amor

Y crecí. Batallar es crecer.
Nacer es sólo el dulce comienzo y ver
que te abandonan, por más viejos,
o en nostalgia de sus nombres,
los seres queridos
y ver que te examinan los otros,
negadores; a los que das amor y no lo quieren.
Es el modo en que te desmienten.
Patean tus manos, escupen lo que das.
Te ofrecen escorpiones, platos de lentejas,
ajenjo para tu sed, cárceles por espacio,
leyes y reglamentos para tu canto libre.

Te dan un nombre, no siempre un nombre puro,
Carlos, te dan nombre de cosa o de virtudes falseadas
porque ya no las creen; cuestionan tu nostalgia;
te negocian el espíritu y te ponen a raya,
te endeudan, te persiguen, te encuitan
para que niegues el alma y los odies;
pero si los odias, pierdes.

Sólo puede salvarte el amor cuando te llames
Carlos y llámate así, pero no olvides
el Nombre Verdadero y que tienes una morada
que te espera el día que te echen
de tu casa social en el mundo.
Akâza-vani, a casa, Tu Morada,
a casa con Tu Nombre de príncipe:
Anahata-zabda, medítalo, sólo ese amor
puede salvarte de los salteadores.


Carlos Lopez Dzur

El hombre extendido

miércoles, 24 de marzo de 2010

PRESENTADO EN GALICIA "MUNDOS POR DESCUBRIR"

Existen muchos mundos por descubrir dentro de la vida de cada uno. Cortázar, sin ir más lejos, utilizó la literatura para ello y, a través de un libro, dio "La vuelta al día en ochenta mundos". Por ello me parece muy acertado que los autores le hayan puesto ese título, "Mundos por descubrir" -Poesía de Galicia y México, a la antología que se acaba de presentar estos días en Galicia, España, y que contiene la obra de dos poetas mexicanos, Roberto Reséndiz Carmona (de Zamora, Michoacán y Olimpia Badillo Iracheta (de San Luis Potosí), junto a la de dos poetas orensanos, José Antonio Santos y José Ramón F. Morgade.
Como digo en el prólogo del libro: "Siempre he pensado que La poesía es el mercurio que mide la temperatura de los sueños y muestra el alma desnuda, el motor de un largo periplo que nos lleva a soprepasar los límites del ser y a sumergirnos en la profundidad del origen. Al escribir, el suelo se hunde bajo los pies pero el verdadero poeta no cae, sino que asciende hasta la incandescencia máxima, se recrea en los matices del fuego, estalla en cada letra. Es lo contrario de la sangre de la estatua, de las voces de ventrilocuo asustado. La poesía es un infierno en el que arden las llamas del deseo infinito, un tranvía que recorre los raíles irisados del delirio, el espíritu que emerge victorioso de la amarga tempestad de la vida. Y los autores que en "Mundos por descubrir" viajan, no cabe duda, en esa realidad de la fuga permanente, en cada latido de la corriente emotiva, en cada chispa de infinito que mata la agonía, en cada mirada que lanza el
ojo abierto de la luz".
A lo largo de varias jornadas, los autores, invitados por el Círculo Poético Orensano, han recorrido una buena parte de la geografía gallega. Ateneos, centros culturales, televisiones, etc. y lo que a mí me parece más importante, Institutos de Enseñanza y Colegios, dando a conocer su poesía. En cierto modo, le han descubierto un mundo nuevo, el poético, a cientos de escolares. A mi memoria vinieron las palabras de una niña de ocho años, al término de una intervención en el patio de un centro escolar de Michoacán, México, con motivo de mi participación en el XIII Encuentro Internacional de Poetas realizado el pasado año 2009, quien me susurró al oído, con una voz dulce y tímida pero llena de certeza y seguridad: "¿Sabe, señor poeta? Cuando yo se mayor voy a ser poeta como usted".
México ha supuesto siempre para mí, en los tres viajes ya realizados, una experiencia impresionante y, sobre todo, un ejemplo. La poesía no sólo se debe escribir, sino tambien sembrar, y ver, como he visto, a más de mil escolares reunidos en el patio de una escuela, vestidos de uniforme y encorbatados como de domingo, para recibir con ovaciones al grupo de poetas que los visitábamos y luego rodearnos para pedirnos autógrafos durante una hora, al término del evento, ha sido algo de lo más maravilloso que he vivido hasta ahora. No por esa cuestión del ego superlativo que solemos poseer los poetas, al sentirnos tratados como si fuéramos estrellas de la NBA, sino porque me estaba dando cuenta que esa es la manera de crear escuela y afición hacia uno de los géneros literarios que, por no ser comercial, es el más olvidado de las editoriales y de las instituciones. Aquellas palabras de una niña, cuyo nombre desconozco, pero que estoy seguro
llegará a ser una de las grandes poetas de México del siglo XXI, por la resolución que desbordaba su mirada, justificaron de sobra el esfuerzo que significó para mí desplazarme desde España al DF y del DF a Zamora, Michoacán.
Roberto Reséndiz y Olimpia Badillo han sabido ganarse en Galicia el afecto de todos los escolares y de todas las personas que los conocemos, sin desmerecer para nada a los poetas orensanos, no sólo por la calidad de su poesía sino por su acento y su especial manera de empatizar con la gente, así como también también por esa chispa de ingenio que a mí tanto me encanta de la gente mexicana. Han sabido transplantar de una manera única este tipo de actividades en las escuelas que son ya una costumbre en México pero aquí, todavía, prácticamente desconocidas, y en las que reside, no me cabe duda, el futuro de la poesía.
El próximo mes de junio, con motivo del XIV Encuentro Internacional de Poetas de Zamora, Michoacán, los dos poetas orensanos que participan en en la antología, y yo, les devolveremos la visita, acudiendo también a San Luis Potosí para presentarla. En mi agenda particular está también intervenir en universidades, centros de las artes, institutos y escuelas de Guadalajara, Cuernavaca y Puerto Vallarta. Tal vez también en algún sitio más, si el tiempo del que dispongo, del 31 de mayo al 23 de junio, me lo permite y fructifican los contactos establecidos.
Estoy convencido de que este cuarto viaje significará, también, otra experiencia inolvidable en la que aprenderé muchas cosas, con el aliciente de que tal vez descubra yo también, de nuevo, otros mundos, como por ejemplo el del amor, si encuentro a la mujer que en el festival del pasado mes de junio depositó en el bolsillo de mi gabán, sin que me diera cuenta, un colgante con una manzana de plata y pedrería, hechizo que alguien me contó utilizan las mujeres de allá para atraer al hombre del que están enamoradas, algo que me vendría realmente bien, dada la situación difícil situación familiar, con mi madre enferma, por la que estoy atravesando.

Marzo 2010©Fernando Luis Pérez Poza
Pontevedra. España.

martes, 23 de marzo de 2010

HOY... *Arriesgarse... Crecer... Superarse...


Pensando que cada día es muy importante
y tiene que ser vivido como si fuera el último...
HOY...consigo darle fuerzas a mi ánimo,
para abrir las ventanas
y respirar el aire puro mirando al universo
con amor y agradecimiento.

Nunca bajes la mirada y habrá
siempre una luz,
un camino que seguir, una esperanza.

Sí alguna vez tus sueños se derrumban
busca el arco iris en la ventana más cercana,
nunca te detengas,
los sueños están ahí ...
solo es cuestión de alcanzarlos,
nada es imposible, así como
nada es para siempre.

Tenemos en nuestro interior las armas necesarias para hacer que la vida sea plena deseando una vida mejor, para ser dichosos y de esa manera hacer realidad los sueños.
La evolución como seres espirituales es crecer continuamente
para superarnos, para ser felices...
"El que no arriesga, no gana...,
El que no gana, no crece...,
El que crece se supera...
y el que no se supera no es feliz.
Si no somos felices...,
¿qué otra cosa importa...?"

Marga®
-Marga Seoane-
-Derechos de autor reservados-

martes, 16 de marzo de 2010

A los fugitivos / migrantes / de Mulek

Correlones de Mulek, sufrientes huestes del último rey
de Judá, los nefitaré en la Banda de Sarah,
me serán saremios de Zara (es) mía.
Y dirán Sara me zara, en regocijos de sarabanda.

Los traeré al Occidente, con plumas
en la cabeza y desnudos, y olvidarán las babilonias
del baboso y que fueron hijos de la Sed
y las tragedias, ciegos ojos y boca amarga de Sedequías.

Mulequitas, muletas quitaré de sus bocas
para que caminen con lenguaje de ritmo
y sea mi canto en sus oídos. Canturréen,
pegostes de sorda algarabía, lloriqueos residuales
de la Desobediencia. En la Banda de Sarah,
les hallaré cobijo, entre indígenas
de América les ubico para que no vuelvan a decir
que no existe Jerusalén terrena
y que Mulek ha desaparecido para siempre.

Entre nefitas les pondré sobre sus pies
con danza nueva y ellos lavarán sus oídos
y limpiarán sus bocas que hoy maldicen
y en la Banda de Sarah fundarán Zara E-mla,
la capital de mi Verbo y mis canciones,
el cumpliemiento de mi mandamiento

Y ésto será la esencia: «Donde te envío,
mi bendición es contigo; aislado no estás, mulequita,
ni en el tiempo ni en el espacio».

«Mi chispito de luz eres en el Universo,
mi oruga de dolor, zarabanda es de mi alegría.
No sufras. Sólo obedece y no seas
como aquel Sedequías que sufrió en vano
porque orejas de burro tuvo siendo rey
entre mortales, enseñó «pudo ser de otra manera»
y mi Señor / Adonai / me ha desamparado.

Te nefitaré y seguirás los preceptos que te doy
en América, con el indio simple y desnudo.
No hay casualidad: Recibe al que te da compañía..
Es mi anfitrión bueno.

Al nefita lo mandé con el muleque
y en la Banda de Sarah te circulo,
interactúa con sus tambores, aprende su lenguaje
y avanza en cada situación en que estés entre ellos
y te darán amor, mulekita.

Lo que suceda es lo que yo quiero, lo que tenía que suceder
para que me obedezcas, porque yo soy el Isvara
del Círculo Infinito, Maestro de la Banda,
y dirijo la murga, y manifiesto el comienzo
del Comienzo Oportuno.

Este es el rumbo, huestes de Mulek.
Los nefitaré en la Banda de Sarah,
me serán saremios, murga y murtina de Isvara
y dirán Sara me zara y es mía la sarabanda.


Carlos Lopez Dzur

16-07-2000 / Del libro Teth mi serpiente / Indice

[Este poema se basa en el concepto del hinduísmo que explca que «Ishvara (del sánscrito, Isvara, o el malayo «Iswara») es el Supremo controlador, señor o posedor del poder. Las enseñanzas de El Vedanta ven a Isvara la causa eficiente, pero no material del Universo. «isvara-murtina» — la manifestación del Señor es el equivalente de Adonai, uno de los nombres de los israelitas para el fenómeno de que no hay casualidad y sí orden organizado en el Cosmos, donde lo que sucede «es la única cosa que podía haber sucedido». Lo filósofico del poema es éso; lo demás es juego rítmico del lenguaje, insinuando el hecho histórico (probable) de que Mulek, único hijo sobreviviente del último rey de Judá (Sedequías) se escapó y vino a Norteamérica, con la ayuda de los nefitas, civilización con que se asimilaron y marcharon a Occidente. Se especula que estas dos tribus fueron los primeros judíos en América... «Zarabanda», «sarabanda», tipo de danza, influenciada por negros e indígenas nativoamericanos; «muleque» (aplicado a los africanos), esclavo, hijo de esclavo menor de seis años; «mulekitas», descendientes de Mulek, hijo del Rey Sedequías, esclavizado por Nabucodonosor; «Zarahemia»: capital de la civilización fundada por la fusión de las tribus semitas mulekitas y nefitas. El poema se puede leer como un Canto a la Diversidad Etnica, el nacimiento ditirambico de las Danzas Rituales o la profecía mormona del evangelio traido a América / por la migración de mulekitas y nefitas; para mí, es una mantralizació n multicultural sobre Isvara / el Controlador cósmico}.



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viernes, 12 de marzo de 2010

ANIMALES SUELTOS

He registrado cada palabra con la que me tocás, y he sentido un espasmódico temblor en todo el cuerpo, como un frío aparente con un chirriar de dientes que sostiene esta gula que tengo por comerte, pero me detengo, como me detengo siempre ante la esmeralda de tus ojos y te dibujo con la astucia que arguye una zorra que va por su presa, con las manos en tensión de garra ofrezco el esfuerzo de tomarte, sin lastimarte, pero recuerda también que no quiero que te me escapes como lo haces siempre tras los sueños encontrados, yo te encuentro a vos, vos me encontrás a mí y es entonces cuando yo me pierdo de mí.
¿Cómo inventar un ideario de rutas donde soplen los vientos paralelos si vivís amontonándote a mi ensueño?

Y rebuscada ya, en la desesperación de los pocos, porque no quiero sucumbir en el silencio, grito a los cuatro cardinales tu bienvenida que llega a traerme tu buena herida; reconóceme como lo hacías antes, coloca tu dactilar haciéndome tu huella yo sostengo el lado de nuestra piel que nos delata y nos ajusto a ella porque uno sabe como empiezan estas cosas pero nunca como terminan; empalagado amor donde la dignidad se pierde nos convertimos en la zoología del querernos.

Un pájaro, un pez o una perra, tal vez debería decir que esto es salvajemente precioso pero no intuyo ningún espacio donde pernoctar en vos, mientras la gaviota de tus besos da su giro en círculos, extraviado andas a mi alrededor.

Sensiblemente,
Fanny Jareton

jueves, 4 de marzo de 2010

Oda a la paciencia

Todo el mundo te trata como una pendeja
y tú sí que a los pesares amortiguas,
aguantas mucho, soportas. calculas
lo que haces para ser consolante,
pero el dedo no se te quita de encima.
«¡Eres cobarde!», te dicen hasta los llorones.
«Eres desvergonzada» , afirman los truhanes.
Todo el mundo te trata como si fueras
el asco de la tierra y ellos, inconscientes
sólo están bebiendo babas, escupiendo hacia arriba,
saboreando gargajos y maldiciones.

Es que pareces tú pordiosera,
harapienta vestidura para el alma,
una emoción en estado de sitio,
una ciudad miserable, bombardeada.
Por eso todo el mundo, pobre y rico,
extroverso de palabras, timoratos de tierria,
inauguran la lengua para insultarte;
se arrancan sus ojos
para ser más que míopes y no verte.

No te bendice ninguno, excepto yo,
y a veces siento que me amarras,
pero no me atrevo unirme a ese coro
de hienas que quiere acción
aunque con ella no vaya a ninguna parte
y no saque otro fruto que las premuras
y las esquivocaciones.

Entonces, cuando los veo que llegan
maldiciendo, echando fieros
y desquitándose contigo, es que te comprendo
y veo que sonríes y no dices nada,
excepto ser como eres:
¡ay, paciente y sabia!
... pero la realidad de tus acusadores
no cambiará. Siempre te tratarán
como una pendeja.

03-12-2000 / «El hombre extendido»


Carlos Lopez Dzur