Bella Noche,
mi amiga:
la Luna llegó
a tu aposento
tú, sigues
empeñada
en no lucir en
el cielo.
Yo, te suplico
Noche
entrar ¡ ya !
de lleno
tus tinieblas
necesito
para recrear
mis ensueños.
Navego en haz
de luz
por caminos
del pensamiento
me traiciona
una sombra
que se mete de
por medio;
me canta al
oído
muy bajito y
zalamero
¡ abrázame
Noche mía !
¡ no me lleve
este viento !.
Viento transmontano
helado
engañoso viento,
me rujes
suavecito
hipnotizas mis
sentimientos.
Noche, no me
abandones
en este
encrespado momento
solo necesito
el reflujo
del que llevo
dentro.
Viento
transmontano
sombra
traicionera
brebaje tu
aliento
envenena mi
pensamiento;
no incites a
mi conciencia
dejar al que
no tengo
que solo en mi
universo
abrazo y
quiero.
Lujuria me
ofreces
Sombra- Viento
valiéndote de
tu presencia
que encandila
mis deseos;
Ven a mi
me suplicas
dadivoso
extiendes tus
brazos amoroso
para rendirme
a tus antojos.
¡ Noche !
¡ven!
no quiero caer
en la bruma
de un ingrato
porvenir
seguir ausente
es mi deseo
amando al que
siempre consentí.
Leonor Rodríguez Rguez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario